Está más que comprobado que el ejercicio, prácticamente al practicarlo en cualquiera de sus formas, ayuda a liberar el estrés. Por eso, mantener el cuerpo activo aumenta los niveles de endorfinas que te hacen sentir bien y dejar de lado las preocupaciones del día a día.
Es necesario entender que igual de importante que es trabajar y mantener las ocupaciones (y preocupaciones) del día a día para tener una mentalidad con objetivos que cumplir, también resulta fundamental incluir en la rutina al deporte para liberar el estrés.
Al sumar cualquier tipo de ejercicio a las rutinas del día a día se estará consiguiendo un cuerpo, pero también una mente más sana. En estos casos sirven tanto los ejercicios aeróbicos como el yoga o simplemente salir a trotar o caminar un rato. No hace falta ser un atleta en plena forma física para notar cambios positivos tanto en la salud del cuerpo como de la mente.
Descubrir la conexión entre el ejercicio y el control del estrés, es uno de los motivos por los que el ejercicio se vuelve un pilar fundamental en la vida de las personas.
¿Por qué el ejercicio físico elimina el estrés?
Como dijimos, al hacer ejercicio, el cuerpo libera endorfinas, las famosas hormonas de la felicidad, por lo que tu sistema estará repleto de una sensación de bienestar general. Cuando esto ocurre, disminuye la tensión nerviosa y la negatividad se evapora.
Por otro lado, otra hormona que participa en este proceso es el cortisol y se libera cuando el cuerpo se encuentra bajo un importante estrés. El deporte es el aliado perfecto para absorberla y disminuir esos síntomas.
Saliendo de estas cuestiones puramente bilógicas, si no se logra liberar el estrés del cuerpo, esto puede llevar a una acumulación de frustración. Pero al realizar actividad física, el cuerpo entra en una dinámica que ayuda a que esa tensión desaparezca.
Un último punto, pero no por eso menos importante es que realizar ejercicio tras un duro día de trabajo o una intensa jornada de estudio, ayuda a liberar la mente de esos pensamientos que la tuvieron ocupada todo el día. De esta forma se estarán enfocando los pensamientos en algo totalmente distinto y se producirá un cambio de escenario más que necesario para poder descansar mejor a la hora de ir a la cama.
Dentro de esta idea también se encuentran asociadas cuestiones como la depresión, la baja autoestima o un irritable estado de ánimo. Sencillamente, el deporte puede literalmente cambiar vidas por completo.
Deportes para liberar el estrés
Dentro de una enorme lista de deportes que puedes practicar para liberar el estrés del cuerpo, existen algunas opciones muy interesantes que van desde ejercicios de alta intensidad hasta simples caminatas. A continuación, repasamos algunas ideas.
Yoga: Esta es una de las prácticas más populares y efectivas para poder mejorar a nivel mental y corporal. Tiene la ventaja de que puede practicarse a cualquier edad e incluso, con el uso de la tecnología, sin salir de casa. Con la práctica de yoga se realizan una serie de posturas que potencian la fortaleza muscular y la flexibilidad. Sin embargo, debido a la importancia que le da este deporte a la respiración, es uno de los deportes milenarios que sirven de mejor manera para combatir el estrés.
Ciclismo: Si hablamos de un deporte aeróbico, el ciclismo debe encabezar esa lista. Ya que permite liberar el estrés de una forma muy activa y con grandes beneficios para el cuerpo, en especial para la presión arterial. Si además se practica al aire libre en lugar de en un lugar cerrado, la desconexión será total.
Pilates: Podríamos decir que el Pilates funciona como un punto intermedio entre el yoga y una actividad aeróbica. Esto es porque, al igual que el yoga, dota de una gran importancia al control de la respiración, fomentando la relajación. Pero también combina ejercicios de intensidad física, cuyo objetivo es activar y reforzar la musculatura.
Correr o caminar: Si bien son cuestiones diferentes, ambos resultan ejercicios aeróbicos y tienen buenos beneficios para la circulación de la sangre y el control de la respiración. Lo que resulta ideal para liberar el estrés día a día. Otra ventaja es que puedes simplemente caminar para ir a los lugares a los que sueles utilizar un vehículo o el transporte público, y de esa manera incorporarlo en la rutina diaria de manera sencilla.
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