Hacer deporte es una de las claves para el buen funcionamiento del organismo. Sin embargo, en verano se deben extremar las precauciones para que las altas temperaturas no sean las culpables de algún susto durante la práctica deportiva. En este artículo hablamos sobre las claves para practicar deporte de forma segura en verano.
El aspecto más importante para practicar deporte de forma segura es la correcta hidratación del cuerpo, porque la práctica deportiva en verano exige al máximo a los atletas y, si estamos hablando de principiantes, esto se potencia. Para ello es fundamental reponer líquidos de forma constante. Y el motivo es que la perdida de estos mediante la transpiración es mucho más grande en esta época del año.
Pero no solo se trata de adaptarnos a nivel de hidratación, sino que la vestimenta también es uno de los detalles más importantes. En verano, la ropa para hacer deporte debe ser holgada, ligera y, a ser posible, utilizando colores claros para que no estos no absorban tanto los rayos del sol. El calzado también forma parte de la vestimenta, y este debe permitir la transpiración.
La Federación Española de Actividades Dirigidas y Fitness (FEDA) también toma parte importante en las recomendaciones para los deportistas y hace hincapié en limitar el ejercicio intenso a las horas menos calurosas del día. Por otro lado, también resulta conveniente reducir la duración del ejercicio y la intensidad del entrenamiento.
Por último, la protección solar también juega su rol importante. Y es que, al igual que la piel se protege al ir a la playa o la piscina, hacerlo si practicamos deporte al aire libre resulta necesario.
La importancia de estar hidratado
El calor siempre es bien recibido como una forma de poder disfrutar más del aire libre, pero también puede ser un peligro para todos aquellos que practican deporte, sobre todo en la calle y en los horarios equivocados. Además de seguir algunos consejos como evitar las horas centrales del día o acortar la duración de las sesiones, la correcta hidratación a la hora de entrenar puede marcar la diferencia.
Los efectos de la deshidratación en el cuerpo, además de atentar directamente contra el rendimiento deportivo, son principalmente tres:
- El aumento de la frecuencia cardíaca, producido por el flujo sanguíneo. Se eleva para contrarrestar ese aumento de temperatura corporal.
- El consumo de glucógeno muscular (los hidratos de carbono) aumenta, por lo que se deberá tener en cuenta. Sobre todo, si la idea son los esfuerzos intensos durante un tiempo prolongado, aumentar los depósitos de glucógeno.
- La percepción del esfuerzo crece ante un mismo estímulo.
Para esto, el objetivo principal del atleta para practicar deporte de forma segura en verano debería ser no llegar al momento de sentir la sensación de sed durante la práctica del ejercicio. Para eso será necesario llevar una estrategia de hidratación antes, durante y después del mismo.
En caso de no consumir el agua suficiente, el cuerpo podría sufrir una fuerte deshidratación que se va a manifestar casi con seguridad como un golpe de calor. Esto puede generar varios problemas, entre los cuales se encuentra como el más habitual el desmayo.
Algunos consejos
Dentro de todo lo mencionado anteriormente otro aspecto importante para practicar deporte de forma segura es nunca descuidar la alimentación, mucho menos en verano. El intestino funciona como un segundo cerebro, y todo lo que reciba va a repercutir a nivel físico y emocional. Por eso, la alimentación debe ser más saludable que nunca y adaptada a las necesidades del deportista. Si bien cada cuerpo es diferente, una buena base de frutas y verduras frescas funcionarán como un hidratante natural para el momento del ejercicio.
Otra idea interesante es la de practicar deportes acuáticos que habitualmente no se realizan durante el resto del año. Por ejemplo, si te vas de vacaciones a la playa, puedes probar con el surf, kayak, nadar a mar abierto o una infinidad de otras propuestas ideales para el verano.
El último consejo tiene que ver con la vestimenta y esto se debe a que la crema solar es una obligación para practicar deporte al aire libre, pero la protección no puede acabarse ahí y lo ideal es salir a practicar deporte con al menos una gorra. El resto de la ropa liviana, holgada y transpirable debería ser también parte de la preparación para practicar deporte de forma segura.
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