El baile deportivo

A nivel de exigencia, el baile deportivo se ha hecho un lugar muy importante en la lista de opciones que cualquier persona tiene para desarrollar una vida saludable. Porque si hablamos de que el deporte es salud, el baile deportivo muestra una intensidad que lo ubica muy lejos del más conocido baile de salón, con características mucho más ociosas.

Cuando en los Juegos Olímpicos de Sidney 2000 se presentó una pequeña demostración para mostrarle al mundo de que se trataba el baile deportivo, la idea logró impactar tanto que finalmente logró volverse un deporte olímpico con la aparición del Break Dance en los próximos Juegos de Paris 2024.

Como mencionamos, la exigencia es muy alta y difiere mucho del baile de salón, y son muchos los requisitos (tanto físicos como técnicos). Las aptitudes más reconocidas son una enorme fuerza y estado atlético, agilidad y coordinación, interpretación musical y resistencia.

 

Historia y comienzos

Con la existencia del baile desde épocas inmemorables, a medidas que se produjeron cambios a nivel social también se producían cambios en las formas de bailar, y el baile deportivo no es ni más ni menos que una de esas adaptaciones a nuevos ritmos, nuevas tecnologías y hasta nuevos nichos de mercado que exigen nuevos tipos de apariciones a nivel de producto.

Fue a principios del siglo XX, con los concursos, cuando surgió la competitividad en el mundo del baile. Aquellas primeras competiciones surgieron en Francia y no consistían más que en simples concursos promocionados por el empresario y bailarín Camile de Rhynal.

Fue en 1909 cuando este mismo hombre de negocios se encargó de organizar, en Paris, una especie de torneo mundial de baile de salón, y unos años más tarde, en Londres (1922), se celebró una competencia similar con las categorías profesional y amateur, con su correspondiente reglamentación a seguir.

Entre 1950 y 1960 comenzaron a consolidarse las diferentes asociaciones y comités pertenecientes a este ámbito, siendo las siguientes federaciones en todo el mundo las que hoy en día pueden destacarse en relación al baile deportivo:

• Federación Internacional de Baile Deportivo (WDSF), a nivel amateur.
• Consejo Mundial de Baile y Baile Deportivo (WD&DSC) a nivel profesional.
• Organización Internacional de Baile (IDO)
• Federación Española de Baile Deportivo (FEBD)

Dos estilos principales

A grandes rasgos, podemos decir que el baile deportivo, a nivel profesional, consta de dos estilos:

Bailes Estándar: Los cuales que incluyen Vlas Vienés, Vals Inglés, Tango, Foxtrot y Quickstep.

Bailes Latinos: Como lo son Samba, Jive, Cha cha cha, Rumba-bolero, Paso Doble.

Como dijimos, esta modalidad solo incluye a 10 bailes. Todos tienen sus técnicas y características particulares, pero, a su vez, todos tienen en común la exigencia técnica, física y mental que lo vuelve una pasión para cualquiera que acepte el desafío de comenzar a competir en alguna de las disciplinas.

Al determinar el tipo de competición, el nivel y la categoría, se estará definiendo el número de bailes que se realizan durante la competencia de baile deportivo. En las categorías altas del baile standard se bailan concretamente los 5 tipos anteriormente mencionados. Mientras que en competiciones de baile latino ocurre lo mismo con los cinco bailes latinos. Por otro lado, existen competiciones combinadas, donde se practican 10 bailes en total, incluyendo 5 bailes de cada estilo.

Salsa deportiva

Esta disciplina dentro del baile deportivo se trata de una combinación de ritmos africanos y caribeños, y también cuenta con algunas notas características del jazz. El origen se remonta a las islas del caribe. Donde sus habitantes fusionaron sus ritmos tribales de tambores con la música que llevaban los colonos europeos. A través del tiempo el ritmo se extendió a diferentes lugares como Estados Unidos, Sudamérica y hasta la propia Europa.

En cuanto al baile en sí, se lleva a cabo en parejas. La mujer apoya una mano en el hombro de su pareja masculina. Y este apoya una mano en la cintura de su pareja femenina. Aunque en el nivel más alto dentro de las competencias se incluyen otro gran número de pasos y movimientos, podemos decir que esta es la postura básica para comenzar a bailar salsa deportiva. Con tres pequeños pasos, de los cuales uno es largo y los otros dos más cortos, siguiendo un compás de atrás – adelante.