Ser entrenador de natación es un trabajo exigente en muchos sentidos. Trabajas todas las horas del día, enseñando un deporte que requiere disciplina, precisión y flexibilidad. Además, a menudo entrenas a niños y eres observado por los padres. Considerando todo esto, hay una serie de atributos que necesitas para ser un gran entrenador de natación.

 

Características de un gran entrenador de natación

Estas son algunas de las características clave que separan a los mejores del resto:

 

Gran comunicador

Tres aspectos de la comunicación son fundamentales cuando se trata de enseñar a nadar a un rango de edades y habilidades. En primer lugar, describir las técnicas de una manera que sus alumnos puedan entender.Motivador de primera clase

Ya sea que esté demostrando un crol frontal o un golpe de estilo libre, hay mucha información que transmitir, especialmente si sus alumnos no han intentado estos movimientos antes.

También hay que tener en cuenta el lenguaje corporal, que es posiblemente el método de comunicación más importante.

El lenguaje corporal es un reflejo externo de cómo te sientes, por lo que los elementos no verbales de tu lenguaje corporal como los gestos con las manos, las expresiones faciales y la postura necesitan transmitir una sensación de control, conocimiento y empatía.

Otro aspecto crítico de la comunicación que es vital para construir relaciones estrechas con sus estudiantes es la capacidad de escuchar.

Dedique tiempo antes y después de las clases para hablar con sus alumnos y mostrar interés en lo que hacen fuera de la natación. Esto sacará a relucir su lado humano, en lugar de hacerlo parecer un entrenador de una sola mente.

 

Motivador de primera clase

Ser un gran motivador requiere llevar tus habilidades comunicativas al siguiente nivel y combinarlas con las habilidades de la gente. No hay nada peor que ser uno de esos entrenadores que simplemente instruyen en lugar de dirigir.

Dar órdenes a un grupo les hará sentir como si no fueran más que engranajes de una máquina y es poco probable que les haga sentir que tienen poder.

Características de un gran entrenador de nataciónSus alumnos deben sentir que todo lo que hacen en la piscina tiene un claro y definido beneficio. Puede reforzar esta idea proporcionando elogios, estímulo e incluso humor ligero cuando la situación lo permita.

No sólo eso, sino que además debe animar a sus alumnos a controlar sus propios pensamientos y sentimientos para crear la autodirección que necesitan para alcanzar sus objetivos. De esta manera, pensarán más en los pasos necesarios para llegar a donde quieren estar, en lugar de centrarse únicamente en los resultados.

La creación de una cultura de aprendizaje autorregulado no sólo facilita la motivación de sus estudiantes, sino que también hace parte de su trabajo.

 

Persona con don de gentes

Esto significa ser paciente, empático y accesible. Ya sea que sus pupilos estén luchando por ejecutar un movimiento correctamente y necesiten más aclaraciones, que les falte confianza porque sienten que no están rindiendo lo suficiente, o que sólo quieran una charla general, usted tiene que ser sus ojos y oídos.

Proporcionar dirección y nutrir a sus alumnos podría ser la diferencia entre que uno de sus estudiantes tenga éxito en la natación y otro no regrese a sus clases. Después de todo, las ventajas mentales que obtendrán de la natación, como superar la presión, trabajar en los objetivos, competir con otros y empujarse a sí mismos, pueden aplicarse a su vida cotidiana.

Hay varias maneras de fomentar una relación estrecha con sus alumnos y ayudarles a maximizar estas ventajas. Por ejemplo, haciendo un entrenamiento individual con ellos después de la clase, ofreciendo incentivos a corto plazo y fijándoles objetivos a largo y corto plazo. Estos son sólo algunos ejemplos de cómo puede hacer un esfuerzo extra por sus pupilos y mantenerlos motivados para entrenar con usted.

 

Organizado y meticuloso

Hay mucho terreno que cubrir cuando se enseña a nadar, especialmente si se trabaja con varios estudiantes de diferentes edades y niveles de habilidad.

Gran comunicadorComo ya sabrán, cada gran nadador tiene sus propias y únicas características, pero hay una cosa que todos estos nadadores tienen en común. Es decir, sólo han llegado a donde están a través de la práctica, la atención a los detalles y un objetivo claro en mente. Estas tres cosas les habrán sido inculcadas desde una pronta edad por su entrenador.

Por lo tanto, un entrenador de natación que llega a una sesión sin estar preparado y sin un objetivo claro en mente no es exactamente el modelo ideal.

Sus alumnos quieren un entrenador de natación formado adecuadamente, que se presente preparado y que se tome en serio su desarrollo. Alguien que haya planeado no sólo la sesión inmediata sino también las semanas e incluso los meses posteriores, y que haya planeado cuidadosamente una sesión en torno al tiempo asignado, el tamaño de la piscina, el equipo y más.

También quieren a alguien que tome un enfoque personalizado del entrenamiento y se centre en los atributos, fortalezas y áreas de mejora de cada nadador.

 

Conocedor y dispuesto a mejorar

Para ser el mejor entrenador de natación que puedas ser, necesitas tener un profundo conocimiento del rendimiento deportivo y un nivel de pasión desenfrenada por tu deporte. Sobre todo, debes estar decidido a seguir mejorando, y no sólo ver la natación como un medio para un fin.

Un gran entrenador de natación, a diferencia de uno bueno, ve esta cualificación sólo al principio de su viaje profesional y busca ampliar sus conocimientos en diferentes áreas.

Sea lo que sea, siempre hay un área de la natación que no has cubierto todavía, y ampliar tus habilidades sólo te hará ganar más clientes y mayor credibilidad a largo plazo.

 

No tener miedo a fracasar

Cómo ser un gran entrenador de nataciónPregúntele a cualquiera que haya tenido éxito en su profesión cuántas veces ha fallado en una tarea en particular y probablemente tendrá una lista tan larga como su brazo. Es la forma en que responden a los contratiempos lo que determina su éxito.

Por lo tanto, como entrenador de natación, ¿por qué no practicar lo que predicas? Intente algo diferente, como añadir algunos ejercicios creativos que sus alumnos no hayan intentado antes, o probar diferentes ejercicios de calentamiento con ellos. Si saca lo mejor de su grupo, genial. Si no sale como se ha planeado, está bien.

No todas las rutinas serán fáciles de demostrar. No todos los nadadores van a responder de la misma manera a sus métodos.

Lo más liberador es cuando te das cuenta de que es imposible hacerlo todo bien. En todo caso, el fracaso es una señal de que te estás presionando a ti mismo y que no estás de acuerdo con hacer un buen trabajo.

Salir de tu zona de confort y dar ejemplo es lo que te hará un gran entrenador de natación.